Losas y tablas de madera para terrazas

¿Por qué elegir una tarima de madera? Las cubiertas de madera están en alza. A la hora de instalar su terraza, puede que esté dudando entre las tablas de madera de la terraza y las losas. Le sugerimos que descubra las diversas ventajas que ofrece la tarima de madera en su proyecto ¿Qué cr...

¿Por qué elegir una tarima de madera?

Las cubiertas de madera están en alza. A la hora de instalar su terraza, puede que esté dudando entre las tablas de madera de la terraza y las losas. Le sugerimos que descubra las diversas ventajas que ofrece la tarima de madera en su proyecto

¿Qué criterios hay que seguir para elegir una tarima de madera?

Hay varios criterios que pueden ayudarle a elegir la tarima de madera ideal para su construcción. En primer lugar, la norma FSC. Esto garantiza que la madera utilizada para su tarima procede de bosques gestionados de forma sostenible. En segundo lugar, el tratamiento de la madera. Para evitar que insectos como las termitas se instalen en las tablas de su terraza de madera y para garantizar su estanqueidad, es imprescindible un tratamiento en autoclave. Una vez verificada esta información, podrá elegir la especie de madera que le convenga y las dimensiones ideales para la construcción de su cubierta

¿Cuál es la diferencia entre las tarimas de madera lisas y las ranuradas?

Si compara las diferentes tablas de madera para terrazas, observará que algunos modelos son acanalados mientras que otros son lisos. No se trata sólo de una cuestión estética. Las tarimas de madera lisas, aunque son agradables a la vista, tienden a resbalar más fácilmente. En cambio, las tablas de madera ranuradas para terrazas requieren un poco más de mantenimiento para evitar que se conviertan en tales

¿Qué mantenimiento requiere la tarima de madera?

Para poder disfrutar de su tarima de madera durante muchas décadas, es importante mantenerla con regularidad. Para eliminar el riesgo de que las tablas de madera de su terraza se vuelvan opacas, será necesario aplicar un aceite protector una o dos veces al año. Independientemente del tipo de tarima elegida, la limpieza periódica con un cepillo le permitirá eliminar los distintos depósitos que podrían hacerla resbaladiza